La Agencia Tributaria devuelve más de 11.200 millones de euros a casi 15 millones de contribuyentes del Impuesto de la Renta de 2022

La campaña de Renta 2022 también ha visto un incremento notable en las declaraciones presentadas, con 23.005.000 declaraciones

impuesto de la renta

El cierre del año fiscal 2022 ha dejado números sin precedentes en la historia de la Agencia Tributaria de España. A fecha de 29 de diciembre, se han efectuado el 97,5% de las devoluciones solicitadas, lo que representa un montante total de 11.269 millones de euros devueltos a 14.691.000 contribuyentes en el marco de la campaña de Renta del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) de 2022.

Además, el año fiscal ha visto un incremento en la cantidad de declaraciones presentadas. Hasta el cierre del año se registraron 23.005.000 declaraciones, un 3,9% más en comparación con el año anterior. De estas, 15.067.000 tenían resultado a devolver y 6.435.000 presentaron saldo a ingresar. Este incremento también se refleja en el número de contribuyentes que han optado por la asistencia personalizada, ya sea en oficinas o por vía telefónica, ascendiendo a 1.850.000, lo que supone 124.000 más que en la campaña anterior.

La digitalización de los procesos tributarios es una tendencia que la Agencia ha adoptado con resultados positivos, como lo demuestra el hecho de que casi el 92% de las declaraciones se presentaron por internet. Sin embargo, este avance tecnológico no debe eclipsar la importancia de ofrecer asistencia personalizada y accesible, especialmente para aquellos contribuyentes menos familiarizados con las nuevas tecnologías. El equilibrio entre innovación digital y atención personalizada es esencial para construir un sistema tributario que sea inclusivo y equitativo.

El aumento registrado en las solicitudes de devolución es un claro indicador del dinamismo económico y de la confianza de los contribuyentes en los mecanismos de gestión tributaria. No obstante, este panorama también suscita interrogantes sobre la eficacia de los procesos y sistemas utilizados por la Agencia Tributaria y sobre la adecuación de las políticas fiscales vigentes. Además, la creciente complejidad en la presentación de declaraciones y la gestión de las devoluciones plantea la necesidad de fortalecer los canales de asistencia al contribuyente.

La Agencia ha respondido a estas necesidades con la implementación y mejora de herramientas como el ‘Asistente virtual de Renta’ y el ‘Informador’, que han ofrecido más de 790.000 respuestas a lo largo del año. Sin embargo, el éxito de estas herramientas no solo se mide por la cantidad de respuestas proporcionadas, sino también por la calidad y la precisión de la información suministrada. Es crucial que la Agencia Tributaria continúe desarrollando y perfeccionando estos servicios para garantizar que los contribuyentes reciban el apoyo necesario para cumplir con sus obligaciones fiscales de manera eficiente y sin contratiempos.

Los datos comparativos con el año anterior también muestran una tendencia positiva, con un aumento del 8,5% en el número de devoluciones pagadas y del 16,5% en el importe de las mismas. Además, el uso de la aplicación móvil de la Agencia ha registrado un fuerte incremento, con 399.000 declaraciones presentadas ‘en un solo clic’, lo que subraya la creciente adaptación de la Agencia a las necesidades y comportamientos de los contribuyentes.

El año fiscal 2022 cierra con un notable incremento en la cantidad de declaraciones procesadas y devoluciones efectuadas, así como una fuerte adopción de las herramientas digitales. El análisis de los datos proporcionados por la Agencia Tributaria no solo nos permite evaluar el desempeño de la entidad en el año fiscal, sino que también nos invita a reflexionar sobre los desafíos y oportunidades que se presentan en el horizonte. La gestión eficiente de las devoluciones es un indicador positivo de la salud del sistema tributario, pero no debe ser motivo para la complacencia. La Agencia debe continuar su labor de innovación y mejora continua, con un enfoque centrado en el contribuyente y una mirada crítica hacia los procesos y políticas existentes. Solo así se podrá asegurar que el sistema tributario no solo funcione con eficiencia, sino que también responda de manera justa y efectiva a las necesidades de todos los ciudadanos.

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